viernes, 23 de noviembre de 2012

El porqué de las cosas...

¿Por qué los lados de un barco se llaman «babor» y «estribor»?
De tanto oírlos se nos han hecho familiares, pero ciertamente son dos nombres bastante extraños desde el punto de vista filológico para significar, como significan respectivamente, los lados derecho e izquierdo de un barco. La razón de esta extrañeza es que su origen etimológico es bien singular: no son términos que procedan del latín ni del griego, sino del inglés antiguo, y a demás están vinculados a realidades que han dejado de existir. Para entender estos términos hay que echar la vista atrás. Vamos por pasos:

1.- los primeros barcos eran impulsados por remos, y necesitaba tal cantidad de remeros que quedaba poco espacio para la carga.

2.- los barcos también eran guiados por dos largos remos, colocados uno a cada lado del timón.

3.- para que el timonel pudiera maniobrar con más facilidad, se fijó a la pértiga un timón horizontal.

4.- por motivos hoy desconocidos este remo estaba montado al lado derecho del timón, de frente a la proa. 

Pues bien, ahora sí podemos pasar ya  a la etimología: en inglés antiguo, el lado derecho del barco se llamó steorborde, o «lado de dirección», y de ahí procede starboard o «estribor». En cuanto al lado izquierdo de un barco, este recibió en principio el nombre d laddeborde, o «lado de carga», que con el tiempo se redujo a larboard. Finalmente, como esta palabra sonaba demasiado parecida a starboard, para evitar confusiones larboard se redujo a port, es decir, «babor». La palabra port quizá provenga del original portside, el lado por el que se anclaba el barco del muelle.

¿Por qué el pelo es liso o rizado?
Que el pelo tenga una estructura u otra viene determinado por nuestros genes: tenemos el pelo que heredamos de nuestros padres. Las claves de la presencia o ausencia de rizos están inscritas en la estructura íntima del pelo, concretamente en los aminoácidos, que son las unidades básicas con las que se forman todas las proteínas. En el pelo pueden distinguirse claramente dos secciones concéntricas: la capa externa o cutícula protectora, formada por células muertas que se superponen como escamas, y la capa interna, de la que dependen las características de tono y textura del cabello, pues en ella se encuentran los pigmentos que le dan color y la mayor parte de la queratina, la proteína fibrosa que le da forma. La queratina es, pues, el material de construcción del pelo, por lo que el cabello será liso, rizado u ondulado en función de la estructura química concreta de su queratina, o mejor dicho, en función de la disposición de los aminoácidos que la constituyen. Para entender la siguiente explicación imaginémonos una escalera de mano con las proteínas de queratina como pasamanos y los enlaces químicos como escalones. Pues bien, si los escalones están rectos, el pelo será liso, y si los escalones están en diagonal, las fibras de queratina adquirirán forman de espiral y el aspecto del cabello será rizado.

¿Por qué algunas personas no distinguen el rojo del verde?
Si somos capaces de reconocer colores es gracias a unas células muy especiales denominadas «conos» y «bastones». Están situadas detrás de la retina, en la parte posterior del ojo. Para llegar a ellas la luz penetra en el cristalino y atraviesa la retina. De estos receptores depende nuestra percepción del color. Existen tres tipos de de conos especializados, cada uno de los cuales contiene un pigmento sensible a un color diferente: uno responde mejor a la luz roja (longitud de onda larga y frecuencia baja), otro a la luz verde (longitud de onda corta y frecuencia corta) y el tercero responde a la luz azul (longitud de onda corta y frecuencia alta). Con estas luces primarias -el RGB de las pantallas- combinadas se obtiene nuestra gama de colores. La totalidad de entre los 120 y 150 colores y matices de colores que provienen de la estimulación combinada de estos tres tipos de conos. La ausencia de un tipo de estos conos causa la incapacidad para apreciar un color en particular. Quien sufre daltonismo suele no poder  distinguir el rojo del verde, y en casos graves, el problema se puede extender a los matices del naranja, verde, marrón y rojo. Aunque este padecimiento es incurable, hay lentes de contacto especiales que permiten al paciente distinguir el verde del rojo, como un tono gris más oscuro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...