Un funcionario ruso se comió 35.0000 rublos -en siete billetes de 5.000- al ser sorprendido por la Policía mientras cobraba un soborno.
En Madrid existe un curioso «spa» que alivia el estrés a través de las cosquillas.
El coche más caro del mundo es el Koenigsegg Travita, un superdeportivo de lujo de 1,58 millones de euros del que sólo se construyeron 3 unidades.
Un hotel de París acaba de estrenar sus nuevas habitaciones antironquidos, que cuentan con paredes insonorizadas y almohadas especiales para mejorar la respiración del «roncador».
El concurso de vestidos de novia con papel higiénico lo ha ganado el diseño de Susan Brennan, quien sólo necesitó cuatro rollos para tan elaborado traje. Susan también cuenta en su haber con bolsos de patatas fritas.
La reina Cleopatra ya usaba unos primitivos tampones como protección menstrual.
En Bélgica, cerca de la ciudad de Braives, se ha construido la llamada «carretera de la vergüenza», que, en 5 kilómetros de recorrido, tiene 250 señales de tráfico.
Si, hace poco tiempo, un joven de 17 años alardeaba de haber vendido un riñón a cambió de un iPad2, ahora es una adolescente china quien ha puesto precio a su virginidad por un iPhone4.
Un jeque millonario de 63 años ha cumplido su sueño: que su nombre se lea desde el espacio. Para ello, ha ordenado que escriban «Hamad» tamaño XXXL en la arena de una de sus islas privadas. ¡La palabra ocupa 3,22 km!
Los fabricantes de iPhone han contratado monjes budistas para que ahuyentaran la mala suerte que dicen que sufría la empresa.
Los nobles del siglo XVIII se limpiaban el trasero con una pluma de ganso.
Mario, el fontanero más famoso de la industria de los videojuegos, ha vendido más de 230 millones de copias de sus aventuras.
Cada tonelada de papel reciclado evita la tala de 17 árboles adultos (de 20 años de vida).
Existen organismos capaces de sobrevivir a temperaturas de hasta 133 °C.
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